viernes, 18 de septiembre de 2015

En la cabeza

Tengo en la cabeza un nido de cigüeñas que,
cada año, me traen arena de la playa y
conchas, estrellas de mar, trozos de barcos pirata,
monedas de reinos lejanos, huesos de hombres
ahogados, cadáveres del pasado.

Empieza a cambiar el tiempo y ellas se van,
pero me dejan sus sueños
enredados en mi pelo creciendo
y creciendo como las olas
de un temporal

2 comentarios:

  1. ¡Qué hermoso poema, Margarita! El paso del tiempo enredado en nidos de cigüeñas, arena de playa, naufragios que nos dejan los cadáveres de los afectos a nuestros pies... y con las cigüeñas que siguen su viaje, los sueños que nos quedan, los deseos de la vuelta... Envuelves los sentimientos en todo este revuelo de naturalezas admirables y nos los traes y sirves con gran sensiblidad. Felicitaciones.
    Salud.

    ResponderEliminar
  2. Estoy de acuerdo con Julio, es un poema bellísimo. Un lujo de lectura. Abrazos.

    ResponderEliminar